Cómo cambiar una llanta ponchada

By gennag | Posted in Uncategorized on Tuesday, May 14th, 2019 at 4:26 pm

Saber cómo cambiar una llanta es una habilidad necesaria para todos los conductores. Si confías en un teléfono celular para salvarte en una emergencia en la carretera, siempre existe la posibilidad de que te olvides de cargarlo, no tener servicio o dejarlo en casa. Una llanta ponchada puede ocurrir en cualquier lugar, y un teléfono celular no es un sustituto para saber cómo cambiarla.

¡Afortunadamente, cambiar una llanta no es tan difícil! Sólo tienes que seguir las siguientes pautas para estar preparado en caso de que se ponche una llanta.

Artículos que necesitas para arreglar una llanta ponchada:

Estos son los artículos que necesitas para cambiar una llanta ponchada:

  • El gato del auto
  • Llave de carga
  • Llanta de repuesto totalmente inflada
  • Manual del dueño del vehículo

Si has extraviado alguno de estos artículos, o si tu auto no vino con estos artículos, debes comprar unos de inmediato. Además, asegúrate de inflar regularmente la llanta de repuesto.

Estos son algunos artículos que no vienen con tu vehículo que debes guardar en tu maletero o guantera en caso de que tengas que cambiar una llanta ponchada:

  • Linterna con baterías que trabajan
  • Impermeable
  • Pequeño corte de madera para asegurar el gato
  • Guantes
  • Cuñas de ruedas
  • Lata de “Fix a Flat” sólo si lo necesitas

Cómo cambiar una llanta ponchada:

1. Encuentra un lugar seguro

Tan pronto como te des cuenta de que tienes una llanta ponchada, no frenes ni gires bruscamente. Reduce lentamente tu velocidad y busca un tramo de carretera recto y nivelado en la línea de precaución. Un estacionamiento vacío con suelo nivelado es un lugar ideal porque evitará que tu vehículo ruede. Además, los tramos rectos de carretera son mejores que las curvas porque el tráfico que se aproxima será más probable que te vea.

Nunca intentes cambiar la llanta en el lado de la calle estrecho cerca del tráfico que se aproxima. Sigue moviéndote (lentamente) hasta que encuentres un lugar más seguro. Aunque conducir en una llanta ponchada corre el riesgo de arruinar el rin, reemplazar un rin es mejor que ser golpeado por un conductor inatento.

2.Enciende las luces de peligro

Las luces de peligro o “flashers” ayudarán a otros conductores a verte en el lado de la carretera. Para evitar un accidente, enciéndelas tan pronto como te des cuenta de que necesitas parar.

3. Utiliza el freno de emergencia

Una vez que este el auto parado, utiliza siempre el freno de estacionamiento cuando te prepares para reemplazar la llanta ponchada. Esto minimizará la posibilidad de que tu vehículo ruede.

4. Aplica las cuñas de las ruedas

Las cuñas de las ruedas van delante o detrás de la llanta para asegurarte de que el vehículo no ruede. Si vas a cambiar una llanta trasera, coloca las cuñas delante de las llantas de enfrente. Si la llanta ponchada está enfrente, coloca las cuñas de las ruedas detrás de las llantas de atrás.

Ladrillos o piedras grandes funcionarán igual de bien como cuñas, sólo asegúrate de que son lo suficientemente grandes como para detener el auto de rodar.

5. Retira la tapadera del cubo

Si tu vehículo tiene una tapadera que cubre las tuercas de la llanta, es más fácil quitar la tapadera antes de levantar el vehículo con el gato. Si tus tuercas están expuestas, puedes saltar al paso 6.

Utiliza la orilla plana de la llave para quitar la tapadera. Esto funcionará para la mayoría de los vehículos, pero algunas tapaderas requieren una herramienta diferente.

6. Afloja las tuercas

Con la llave de asa, gira las tuercas en sentido contrario hasta que se aflojen. Es posible que tengas que usar mucha fuerza para hacerlo. Si este es el caso, utiliza el pie o todo tu peso corporal si es necesario.

Afloja las tuercas alrededor de 1/4 a 1/2 de una vuelta, pero no las quites por completo.

7. Coloca el gato debajo del vehículo

Coloca el gato debajo del marco del vehículo, junto a la llanta que esta ponchada. Muchos marcos de vehículos tienen plástico moldeado en la parte inferior con un área despejada de metal expuesto específicamente para el gato. Para levantar de forma segura y evitar daños al vehículo, sigue las instrucciones en el manual del dueño del vehículo para la colocación del gato.

8. Levanta el vehículo con el gato

Para evitar que el gato se asiente bajo el peso de tu vehículo y se desequilibre, coloca un pequeño corte de madera debajo de él antes de intentar levantar tu vehículo. Esta táctica es especialmente útil en el asfalto.

Con el gato correctamente colocado, levanta el vehículo hasta que la llanta ponchada esté a unas seis pulgadas por encima del suelo.

Nunca coloques ninguna parte de tu cuerpo debajo del vehículo durante o después de levantar el vehículo con el gato.

9. Desenrosca las tuercas

Ahora sí, quita las tuercas. Ya que ya las has aflojado, deberías ser capaz de desenroscarlos a mano.

10. Retira la llanta ponchada

Agarra la llanta por las bandas de rodadura, jálala suavemente hacia ti hasta que esté completamente libre del cubo detrás de él. Ponla de lado para asegurarte de que no ruede.

11. Monta la llanta de repuesto en las tuercas de la llanta

Coloca el repuesto en el cubo alineando el rin con las tuercas. Empuja suavemente hasta que las tuercas se vean a través de la llanta.

12. Aprieta las tuercas a mano

Vuelve a colocar las tuercas en los pernos de la llanta y apriételas completamente a mano. Una vez que estén todas puestas, revisa cada una de nuevo, apretando todo lo que sea posible.  Las apretarás con la llave después de bajar el vehículo al suelo.

13. Baja el vehículo y vuelve a apretar las tuercas

Utiliza el gato para bajar el vehículo de modo que la llanta de repuesto esté descansando en el suelo, pero el peso total del vehículo no está completamente en la llanta. En este punto, debes apretar las tuercas con la llave, girando en el sentido derecho, tanto como sea posible. Empuja la llave hacia abajo con todo el peso de tu cuerpo.

14. Baja el vehículo por completo

Baja el vehículo hasta el suelo y retira el gato. Dale a las tuercas otra vuelta con la llave para asegurarte de que estén lo más apretadas posible.

15. Vuelve a colocar la tapadera

Si la tapadera que quitaste de la llanta ponchada se ajusta a tu repuesto, ponla en su lugar de la misma manera que la quitaste. Si no cabe, guárdala en la cajuela.

16. Revisa la presión de la llanta de repuesto

Debes revisar la presión de la llanta de repuesto para asegurarte de que esta seguro para manejar. Los repuestos temporales “T-Type”, también llamados “mini-repuestos”, requieren 60 psi (420 kPa).  Si la llanta necesita aire, maneja (lentamente) a una estación de servicio inmediatamente.

18. Lleva la llanta ponchada a un técnico

Las llantas de repuesto temporales no están hechas para conducir largas distancias o a altas velocidades, así que maneja con precaución hasta que puedas visitar a un técnico de llantas. Un profesional debe ser capaz de determinar si tu llanta necesita reparación o si es tiempo de reemplazarla.

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